Y si te vas me voy por los tejados.
Las veces que me fui buscándote. Las veces que te fuiste buscándome. Las veces que nos encontramos en un respiro, en un suspiro, en un descanso de tanta comodidad de serie de televisión norteamericana. Sin ningún fin, como una ilusión. La ilusión que nos dejaba seguir creyendo que las cosas podían ser de esa manera que tanto nos contamos.
Yo fui y vos no estabas. Vos fuiste y yo me había ido. Pongamos que hablo de Madrid.
Todo comenzó en un cruce de Gran Vía y Avenida Belgrano.
"los besos que perdí por no saber decir, te necesito..."de un gallego renegado que cada día fraguaba historias tristes con el óxido de los balcones que encontraba a su paso. Que decidió jugarse a las cartas el destino; que cambió los mentideros castizos sin golondrinas por el salitre y el cielo entre los que se encierran, tras nubes de paso, todas las respuestas. Que se perdió entre algún pliegue del destino la mirada que buscaba, los ojos que temía, la sonrisa de su "Maga".........
Mil besos porteñita, nunca dejarás de sorprenderme.